Ana Álvarez

Cada tarde, Mara, una estudiante de Historia, se refugia entre las estanterías de una librería antigua en el barrio lisboeta de Alfama. En ese rincón lleno de encanto y olor a papel viejo, encuentra la calma para estudiar… Hasta que un día, dentro de un libro polvoriento de la colección de la Quinta Almeida, aparece una cita manuscrita que parece contada desde otro tiempo.

Intrigada por la posibilidad de una historia de amor olvidada, Mara comienza a investigar. No tarda en aparecer Gustavo, un restaurador de libros tan reservado como atractivo, que muestra un inusual interés por la misma colección. Lo que ella no sabe es que su interés va más allá de lo profesional: la Quinta Almeida forma parte de su pasado familiar y de secretos que aún no han salido a la luz.

Clara vive entre piedras preciosas y diseños que desafían las normas. Su pequeña empresa de joyería alternativa empieza a despuntar, pero un encargo inesperado -una colección clásica para una firma de renombre- podría cambiarlo todo. Para cumplirlo, necesita a alguien con precisión, técnica… y justo el nombre que aparece en su mente es el último al que querría llamar: Jaime.

Jaime lleva años atrapado entre las viñas y el legado familiar de una bodega que nunca fue su sueño. Él es diseñador de corazón, aunque el mundo parezca haberlo olvidado. Cuando Clara le ofrece la oportunidad de volver al diseño, sabe que no puede rechazarla. Si tan solo no se tratara de ella…

Porque Clara y Jaime comparten más que talento: comparten un pasado lleno de ironías, discusiones eternas y un choque de personalidades que terminó muy mal. Ahora se ven obligados a convivir en un mismo taller, entre bocetos, metales preciosos… y recuerdos que aún arden bajo la superficie.

Charlotte Moore está dispuesta a cualquier cosa para salvar el rancho de su familia, así que, en contra de lo que le dicta el sentido común, decide contratar a Benjamín Davis, un hombre taciturno que solo parece ser amable con los caballos y que ha despertado una extraña curiosidad en ella, tanto por sus silencios como por su mirada, que le hace sentir mariposas en el estómago.

Un escándalo en su anterior trabajo como criador de caballos de carreras obliga a Ben a buscar un lugar apartado en el que ocultarse hasta poder limpiar su nombre y el rancho Moore parece el escondite perfecto.

La creciente complicidad entre dos desconocidos en un bello rincón del Valle del Jerte; una inesperada conexión entre la directora de una galería de arte y un periodista en el París de los años 20; la revelación de los verdaderos sentimientos entre un hombre y una mujer que parecían odiarse; los inicios de la historia de amor entre una alumna y su maestro escultor en un pueblito de la Toscana; el destino haciendo de las suyas para unir en una sugerente cena a un ejecutivo muy ocupado y una estudiante de moda en el sofisticado Manhattan...

Erica tiene que buscar empleo en un sector que no domina. Para ello se ve obligaba a modificar su aspecto con el fin de cumplir uno de los requisitos de la empresa.

Jon es directivo en esa compañía y necesita con premura una nueva asistente. El puesto vacante lo ocupa Erica, una chica poco agraciada, pero muy divertida, que le hace olvidar por completo su aspecto.

Entre refranes y alguna que otra metedura de pata, viajes, cafés y chocolate se van descubriendo el uno al otro, ignorando la relación laboral que los une y olvidando una regla de oro de Erica: donde tienes la olla, no te quites el sayo.

Carlos se reencuentra con sus antiguos compañeros de facultad años después de terminar la carrera. Cada uno siguió con su vida. Él también, dando por imposible el amor que siempre sintió por una de sus amigas de la facultad.

Maika acude a la reunión de antiguos alumnos con la ilusión de reencontrarse con sus amigos y compañeros. Pero todos han cambiado. Incluso el chico larguirucho y divertido que nunca le inspiró más que una sincera amistad.

Rebeca y Bruno tuvieron una relación mientras ambos estudiaban medicina, que terminó al marcharse él a Estados unidos para empezar a trabajar en un importante hospital de Stanford.

Bruno regresa seis años después convertido en un eminente neurocirujano para hacerse cargo del departamento de cirugía de un hospital de Sevilla, sin sospechar que Rebeca trabaja en él.

Durante ese tiempo la vida de ambos ha cambiado mucho, los dos se han hecho un hueco en su profesión. Pero los sentimientos que una vez tuvieron uno por el otro siguen latentes, por mucho que quieran ignorarlos. Porque no siempre la distancia es el olvido.

Ian tiene una leyenda a sus espaldas… pero no es la que todos piensan. Ian pertenece al clan Lennox. Todos lo tienen por un hombre rudo y solitario, que no cree en el amor. Rechaza a cuanta mujer le proponen como esposa o trata de conquistarlo.

Kayla pertenece al clan MacGregor rival de los Lennox desde tiempos ancestrales. Se conocen por casualidad, pero ambos tienen claro que su amor es imposible, pues sus familias nunca permitirán una unión entre ellos.

¿Deberán renunciar a estar juntos? ¿O pondrán en peligro sus vidas para logarlo? Están dispuestos a todo, por muy descabellada que sea la idea.

La tranquila vida de Freya en las Tierras Altas se ve interrumpida por un acosador, así que, cuando recibe la noticia de que ha heredado una casa en Brighton, hace las maletas, dispuesta a trasladarse al sur de Inglaterra a recuperar la paz… pero el vecino de arriba le declara la guerra nada más llegar.

Para Dylan, descubrir que la casa de su tío va a pasar a manos de una desconocida es una ofensa doble: ni soporta a los escoceses ni a los arribistas, y la vecina de abajo parece ser ambas cosas, así que prepara una batalla para echarla de allí.

Pero cuando la vida de Freya corre peligro, Dylan descubrirá que, tal vez, las primeras impresiones no siempre son las acertadas y que la relación con su atractiva vecina es mucho más excitante de lo que esperaba.

La vida de Silvia es un desastre. Se siente desbordada y utilizada por todos en su familia, vive en un estrés permanente y al borde del colapso físico y mental. Cuando un día sufre una crisis en el trabajo, su jefe le brinda la oportunidad de alejarse de todo durante unos meses cubriendo una baja maternal en la otra punta de Andalucía.

Leo es higienista dental, aunque su vocación frustrada es el teatro y la música. En sus ratos libres compone y toca el piano. Para dar rienda a su vena artística, ha organizado un grupo de teatro aficionado en la asociación cultural de su barrio y está montando una obra que se representará al final de las actividades.

Silvia por primera vez en su vida tiene las tardes libres y decide apuntarse al teatro. Leo es un hombre muy diferente a su marido y entre cafés y ensayos pasan mucho tiempo juntos.

Eva es profesora en un instituto de Alicante. Siempre ha sentido fascinación por Escocia y la muerte de su madre le brinda la oportunidad de viajar a este país para realizar su sueño de profundizar en la cultura e historia, aunque ese no es el único motivo de su viaje.

Contacta con Jock, un eminente profesor de la universidad de Edimburgo, carismático, atractivo y muy querido y respetado por su alumnos, para que la ayude con sus estudios sobre su país.

Él despertará en ella, además de su ansia de conocimientos, un espíritu aventurero que no sabía que poseía, y juntos se embarcan en un viaje en autocaravana para descubrir el otro motivo que la llevó a Escocia.

Adriana es correctora literaria y trabaja por cuenta propia, pero como está empezando y tiene pocos ingresos se ve obligada a compartir casa con otros compañeros. Maxi, uno de ellos, le resulta muy atractivo, si no fuera por...

Maxi tiene alquilada en la casa dos habitaciones, una donde duerme y otra donde desarrolla su profesión.

Enredos, malentendidos, situaciones tergiversadas y palabras malinterpretadas hacen que Adriana sienta a la vez rechazo y fascinación por Maxi, y que desee averiguar qué oculta la misteriosa habitación que él mantiene siempre cerrada con llave.

Después de una mala época en su vida Natalia regresa al pueblo que abandonó quince años atrás, dispuesta a recuperarse con el apoyo de su familia. Nada más llegar empieza a recibir, de forma anónima, unos misteriosos ramilletes de sus flores favoritas acompañados de unas notas que le hacen suponer que, quien las envía, lleva toda la vida enamorado de ella.

Piensa que se trata de alguien de su entorno más cercano y duda entre tres posibles candidatos. Sin embargo, a medida que los conoce más, su corazón se va decantando por uno de ellos.

Jorge Luján dirige su hotel con puño de hierro y sin guante de seda. A Berta nadie le ha dicho nunca cómo debe hacer las cosas.

Jorge Luján es el trillizo que más se parece a su madre por carácter. Es serio, inflexible y exigente con los trabajadores del hotel que dirige. Berta Navas ha vivido toda su vida el mundo de la hostelería pues su familia es dueña de un centro de ocio y multiaventura en la sierra de Gredos.

Cuando entra en el hotel de Jorge a trabajar en una sustitución sus ideas chocan con las del director, al que todos los empleados llaman «míster» a sus espaldas.

Nico Luján es trillizo. Es alegre, desenfadado y carismático. Trabaja realizando documentales para National Geographic lo que le obliga a recorrer el mundo y le permite saciar su sed de aventuras.

Iris Trueba es decoradora de interiores. Sus diseños son sobrios, minimalistas y muy apreciados. En una fiesta conoce a Nico y tienen una aventura de una noche. Poco después su mejor amiga le cuenta que mantiene una relación y, al mostrarle una foto descubre que es el mismo hombre con el que se acostó, solo que ella lo conoce con otro nombre, con el que firma sus reportajes: Nico.